Desde el comienzo de la vigilia de trabajadores autoconvocados se vivieron momentos de tension sobre la ruta 43, en varias oportunidades los idas y vueltas con los conductores de camionetas o moviles de empresas terminaron en violencia pura. El ataque a un micro con personal que se dirigía a prestar servicio a una minera fue el fiel testimonio de lo relatado. A este episodio se le suman varias denuncias de particulares y choferes de empresa que recibieron algún tipo de reacción y daño material sobre los vehículos en los que se transportaban, esta escena se repite en el acceso a Las Heras. Por lo pronto una orden judicial solicita el desalojo de los manifestantes , medida que hasta este momento no ha sido acatada