En las últimas horas salió a la luz un video que muestra a Roberto Barría, empresario de Rio Gallegos y sobrino del conocido testaferro Kirchnerista “Rudy” Ulloa.
En un estado de violencia descomunal destrozando por completo la casa de su ex mujer.
En una de las secuencias se pude ver como el empresario apenas balbucea e insulta desde una de las ventanas a la mujer y con intenciones de ingresar al interior de la casa dice: “Hija de Putx, déjame entrar. Dale si no te hice nada”.
Lo cual ella le contesta: “mira todo lo que me hiciste”. “Ahí está el violento de Roberto Barría, Yolanda S.A, todo el mundo va a saber quién sos ahora”.
El nombre “Yolanda S.A” hace referencia a una de las principales empresas de construcción que trabaja con el IDUV desde hace varios años.
Casualmente el dueño de la misma es el Roberto Barría, sobrino del principal socio Kirchnerista en la provincia de Santa Cruz que paso de ser chofer del ex presidente Néstor Kirchner a empresario multimillonario, de la noche a la mañana.
Luego, en otra parte del video se ve como el hombre con toda la cara ensangrentada (producto de una pelea entre amigos). Intenta quitarle el celular a la chica que estaba dentro de su casa, asegurando que era de él.
Pero lo que en realidad intentaba hacer es borrar el video que ella estaba grabando, como prueba de lo que estaba sucediendo.
“Por qué me haces esto”, relata la joven llorando y en un estado de nervios al ver como su casa estaba totalmente destrozada.
Por su parte, la policía con un accionar insólito casi inoperante, no lo detiene (por lo menos en lo que se observa en el video) sino más bien lo mantiene lejos de la chica que estaba dejando todo filmado.
La familia Ulloa ya había protagonizado un hecho controversial en el año 2009. Cuando el sobrino del «Rudy Ulloa» produjo un accidente mientras iba a bordo de una Nissan Frontier perteneciente al gobierno de Santa Cruz y chocó contra un Renault 12, donde viajaba una niña de tan solo 13 años que tuvo que ser atendida de urgencia en ese momento.
El tío “Rudy” también estuvo involucrado en otro hecho controversial hace aproximadamente un año cuando fue escrachado y llamaron a indagatoria por su participación en una “fiesta clandestina gitana” en medio de un aislamiento social preventivo y obligatorio, producto de la pandemia.
En base a este repudiable episodio de violencia doméstica, un colectivo de mujeres prepara un escrache público y una campaña en redes sociales para tratar de que la justicia accione con rapidez ante esta situación. “Basta de impunidad, dicen protegernos y los amigos del poder nos quieren seguir matando”, dice el posteo que publicaron en Instagram.
Fuente: La Prensa de Santa Cruz