Hubo conferencia del Comité Operativo de Emergencias, donde se describió la realidad epidemiológica de Pico Truncado. Expresaron un estado de alerta no por la cantidad de casos activos de COVID19, sino por sus características: el 60% requirió internación, y el 30% se encuentra en terapia intensiva, en situación de “gravedad total”. Este mediodía, desde el Comité Operativo de Emergencias se retomó la metodología de informar a través de conferencias de prensa las novedades más importantes en relación con la situación epidemiológica de Pico Truncado, como así también los protocolos para prevenir la propagación del COVID-19 en la localidad. En este marco, tomó especial repercusión la afirmación de la dra. Lucía Ramis, Directora del Hospital local, quien manifestó su preocupación por el elevado número de casos que están requiriendo internaciones, incluso en vecinos de corta edad y sin patologías previas de relevancia. “Si bien tenemos solamente 13 casos activos, lo que nos sorprende es la agresividad que contiene el virus, y las bajas edades que tienen estos pacientes. Sepan que antes de cada 10 personas, internábamos 4, y uno o dos pasaban a terapia intensiva, y ahora de los pocos casos, el 60% requirió internación, y el 30% se encuentra en terapia intensiva, con gravedad total. Esto nos asusta, y nos llama a tomar conciencia” detalló la profesional sanitaria. Siguiendo la misma línea, se puso de relieve la virtual existencia de contagios no registrados por el sistema, debido a la reducción de la cantidad de hisopados que realizan los vecinos. “Le pedimos a la conciencia ciudadana que aquel que tenga el menor de los síntomas, que se presente a testearse” señaló Ramis, añadiendo que se pondrán en marcha testeos masivos en instituciones y sectores barriales, para aumentar la capacidad de detección de los posibles focos de contagio. Junto a Ramis, estuvo presente el Coordinador del COE, Carlos Gutierrez, quien reafirmó la voluntad de profundizar los controles nocturnos realizados de manera conjunta por Protección Civil, las Direcciones municipales de Tránsito y Comercio, Gendarmería Nacional, Bomberos y las Seccionales Primera y Segunda de Policía, para reducir la circulación de vecinos en horarios nocturnos, y controlar el cumplimiento de los protocolos. Finalmente, se detallaron los protocolos para trasladarse a otras localidades, y se anunció que no se descarta el retorno de los controles vehiculares en los ingresos a la localidad.