Debutó en un amistoso el jóven de 16 años nacido y criado en Pico Truncado, para el club Chacarita Juniors.

Salido del Club 13 de Diciembre, Máximo Joaquín Curaqueo logró cumplir el sueño de jugar en Buenos Aires. Luego de varias pruebas y con el acompañamiento de su familia, el joven logró su fichaje en Chacarita.

«Lo llevábamos con mi esposa a varios clubes que venían a nuestra localidad», comenta Sebastián, el padre del jóven, «hasta que un día lo convocó Pablo Celiz, un captador de Las Heras que trabaja con una agencia deportiva y programamos un viaje juntos con mi hijo para probarse en Huracán», agregó.

Además, en diálogo con La Gaceta, Sebastián cuenta que para poder solventar los gastos que le llevó, la familia organizó rifas, con la esperanza de que «le sirva como experiencia en su vida y por lo menos tenga la oportunidad de soñar». Cabe destacar que durante la estadía en Buenos Aires los jóvenes que se probaban en el club se levantan todos los días a las cinco de la mañana para entrenar a primera hora a nivel profesional.

Luego de esa semana en Huracán, Máximo recibió una devolución positiva por parte del club, pero lamentablemente no contaban con lugar en la pensión. Nuevamente en Pico Truncado, Máximo se probó para el club Camioneros BS, y lo volvieron a llamar a la semana para comenzar su entrenamiento. Con este escenario, Sebastián decidió enviar a su hijo a una pensión privada para jóvenes futbolistas de diferentes clubes. En tres días Curaqueo se prueba en Chacaritas y es finalmente fichado.

Este sábado, Máximo Curaqueo debutó en un partido amistoso para el club, luego de tanto esfuerzo, personal y familiar.